Cada cuerpo es diferente y por tanto es necesario buscar el tipo de vestido que se ajuste mejor, este es uno de los puntos más importantes para la diseñadora, quien a lo largo de su trayectoria, no solo ha confeccionado vestidos de novia, pues tiene presente que la Dama de Honor ocupa un lugar privilegiado en la corte.
Esta diseñadora vasca, nació en san Sebastián, ha participado para varias firmas reconocidas y las múltiples presentaciones de sus colecciones en salones y ferias nacionales e internacionales avalan sus 15 años de carrera convirtiéndola en un icono de la moda nupcial a nivel mundial. Abrió su taller en 2002 donde atiende a sus clientes para ofrecerles un vestido totalmente personalizado, lo contrario de sus diseños pues ellos nacen 100% de ella.
Al momento de inspirarse, Isabel, toma en cuenta no sólo los aspectos físicos de la novia sino también su personalidad, por eso le gusta saber cómo viste día a día, con qué se siente más cómoda, su forma de ser y el tipo de boda que ha planeado. Esto le permite diseñar un vestido que vaya de acuerdo con la personalidad y cuerpo de la novia, pues está clara que no todos los diseños son aptos para todos los cuerpos.
El material que usa para la confección de sus vestidos algunas veces responde al diseño de los mismos y otras los diseños son realizados exclusivamente para un determinado tipo de tejido. Al ser un icono de la moda, procura estar siempre innovando sus diseños, pero afirma que las novias de hoy en día prefieren colores como el malva o el rosa en pequeñas pinceladas en su vestido, sin embargo otras optan por el vestido completo de un color diferente al blanco.
Entre los materiales más usados por la diseñadora se encuentra el raso, mikado, satén, bordados, tules y organzas.
Su colección Essence presenta diseños en los cuales las novias muestran la espalda descubierta y sus vestidos van desde los ceñidos con grandes detalles hasta los modelos con pedreria, plumas y adornos hechos a mano.
Fotografías tomadas de: Divina se nace.